“Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas” Proverbios 3:5-6. Nunca hay un tiempo para no confiar en Dios. Tenemos que confiar en Él tanto en los buenos tiempos como en los manos tiempos, porque necesitamos a Dios todo el tiempo. Sea cual sea la circunstancia, nunca dejes de tener tu confianza puesta en Dios. Quizás has intentado arreglar las cosas muchas veces, pero no parece funcionar. Lo que tienes que hacer es cambiar tu enfoque porque Dios sigue teniendo un plan. Echémosle una mirada sistemática a Nehemías 4:2 “Y habló delante de sus hermanos y del ejército de Samaria, y dijo: ¿Qué hacen estos débiles judíos? ¿Se les permitirá volver a ofrecer sus sacrificios? ¿Acabarán en un día? ¿Resucitarán de los montones del polvo las piedras que fueron quemadas?” Durante muchos años, el pueblo de Israel intentó construir un futuro que parecía imposible. Las estructuras estaban en ruinas, las puertas de protección estaban inoperativas y el pueblo era tan vulnerable. La gente alrededor de ellos veía toda desventaja y ninguna cosa buena saliendo de esa situación. Se burlaban de ellos a la cara. Pero Dios les dijo que no se entristecieran ¿Cómo respondes cuando las circunstancias y las situaciones intentan aprovecharse de ti? Corres hacia Dios y sigues confiando en Él o empiezas a encontrar soluciones humanas que realmente no son soluciones? En Nehemías 8:10, el siervo del Señor les dijo, “el gozo de Jehová es vuestra fuerza”. A Dios le complace acercarte a Él y nos está dando a cada uno de nosotros el poder de edificarnos de nuevo con la fuerza que sólo Dios puede dar. Hoy tú y yo podemos estar en cualquier situación regocijándonos en la verdad eterna de la palabra de Dios que ha sido proclamada sobre nosotros. Es cierto que vivimos en tiempos difíciles, pero nuestro Dios es mayor que todas las luchas que la vida pueda traer. Aférrate a la palabra de Dios, a sus promesas y confía en Él en todo. Puede que ahora mismo estés experimentando un revés o un problema, pero no permitas que una circunstancia temporal se convierta en un destino permanente. Acércate hoy a Dios y Él se acercará a ti. (Santiago 4:8). Declara tu confianza en Él. ¡Le importas!
— Bishop
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